El Coloso de Rodas fue una estatua del dios griego Titán Helios, de 33 metros de altura, erigida frente a la isla griega de Rodas, por Carés de Lindos entre el 292 y el 280 a.C. Era una de las siete maravillas del mundo antiguo y hacía guardia a la entrada del puerto de la ciudad, con un pie a cada lado de los barcos que pasaban. Pero permaneció en pie sólo 54 años, hasta que fue destruida por un terremoto en el año 226 a.C. Su posición entre las siete maravillas del mundo se ha vuelto casi mitológica. Se están haciendo planes para construir una nueva estatua mucho más grande; con 122 metros, será casi cuatro veces más alta. El proyecto fue diseñado por un pequeño colectivo de arquitectos, ingenieros y agentes turísticos. Coronado por un faro de navegación y un mirador, el nuevo Coloso propone albergar una biblioteca, un museo, un centro cultural y un espacio de exposición. Costo estimado de 250 millones de dólares. Esta versión, aunque mucho más grande, sería capaz de combatir los efectos de los terremotos. Es dorado, aunque reflectante, estará formado por paneles solares para generar energía. Aún no se ha fijado una fecha de construcción.
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