En el mundo moderno, el periodista ya no es únicamente el narrador invisible que teje historias y revela verdades. En muchos casos, han pasado a ocupar un espacio central en el foco mediático, transformándose en verdaderas "estrellas" con una notoriedad que rivaliza con la de los protagonistas de las noticias que cubren. Pero ¿cómo llegamos aquí, y cuáles son las implicancias de esta transformación?
La tecnología y el auge de las redes sociales han sido piezas fundamentales en este proceso. Antes, los periodistas escribían para un público que apenas conocía su rostro o su nombre. Ahora, gracias a plataformas como Twitter, Instagram y YouTube, han adquirido un nivel de interacción directa y constante con sus audiencias, lo que les permite construir una marca personal. Muchos incluso trascienden sus roles informativos y se convierten en influencers, ofreciendo opiniones y contenido más allá de su ámbito profesional.
Sin embargo, este ascenso al estrellato tiene sus riesgos. La búsqueda de notoriedad puede llegar a influir en el trabajo periodístico. La tentación de generar contenido "viral" o controversias puede opacar el compromiso con la objetividad y la verdad. Además, algunos periodistas estrella terminan usando su posición como plataforma para promocionar agendas personales, lo que puede dañar la credibilidad y la confianza en los medios.
Por otro lado, es innegable que esta visibilidad ha contribuido a que el público valore más el esfuerzo y la dedicación que implica el periodismo. También ha permitido que algunas historias, que de otra manera habrían quedado en el olvido, encuentren eco gracias al carisma y la influencia de ciertos periodistas.
Entonces, ¿cómo equilibrar la balanza? La clave radica en recordar que el protagonismo del periodismo debe recaer en la noticia, no en quien la cuenta. La figura del periodista puede ser influyente sin convertirse en el centro de atención, priorizando siempre la integridad, la transparencia y el servicio a la sociedad. En argentina no solo hay periodistas y medios estrellas, sinó tambien militantes. Hoy en dia estan divididos en dos (socialistas y capitalistas), ambos son derechosos pero algunos promocionan la izquierda, pero viven en Puerto Madero. Depende quien les pague mas. Ya no existe o queda poco del periodismo informativo, sino que cada vez mas pululan los periodistas influencers!